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¿Quién eres tú?

¿Quién eres tú?

¿Te conoces? 

 

¿Te dedicas tiempo?

 

¿Te cuidas?

 

Si estás embarazada, te encuentras en un momento vital de transición. 

 

Cuando nace un bebé, también nace una madre.

 

Gabriel Federico desarrolló la teoría de las esferas del embarazo, según la cual éste no sólo se da en el cuerpo físico, sino que suceden cambios importantes también en las esferas mental, emocional y espiritual. Según esta teoría, al nivelar las diferentes esferas durante el embarazo, la crianza posterior se puede vivir de forma más armónica y estable.

 

El embarazo de cada mujer muestra toda su vida anterior a la creación de este nuevo ser.

Conocer el proceso de nacimiento de una manera integral, en las cuatro esferas, permite abordar la situación de manera natural, con más seguridad y menos bloqueos.

 

ESFERA FÍSICA:


Dependiendo de cada persona, se pueden dar cambios como más necesidad de dormir, micción más frecuente, mareos, náuseas o vómitos. Se produce también un agrandamiento de la masa del músculo cardíaco, que incrementa en 1,5 litros su volumen sanguíneo para facilitar y asegurar el intercambio de oxígeno a través de la placenta. Y por supuesto, el crecimiento paulatino de la barriga. 

 

El cuidado de esta esfera tiene que ver sobre todo con la alimentación, la actividad física y el descanso. 

Relacionado con ello, la musicoterapia ofrece ese cuidado a través de procedimientos como la relajación a través del movimiento, que prepara a la mujer para el parto, fomentando un estado de relajación mediante la música con una situación generada de movimiento.

 

ESFERA MENTAL:


En esta esfera encontramos pensamientos y creencias que pueden dificultar a la mujer la vivencia positiva del embarazo y puede extenderse también al momento del parto e incluso a la posterior crianza.

 

“Todas las mujeres de nuestra familia han parido por cesárea.”

 

Mensajes como este quedan grabados en el subconsciente y generan bloqueos que pueden afectar a su salud mental. 

 

El cuidado de esta esfera tiene que ver con una buena atención psicológica, para lo que la musicoterapia aporta herramientas a través de procedimientos como visualizaciones creativas con música, las cuales pueden revelar información necesaria para reconocer esos pensamientos y creencias y transformarlos.

 

ESFERA EMOCIONAL:


Tiene que ver con la conexión con sus sentimientos y emociones, así como con responder a la necesidad de introspección que se produce por parte de la mujer embarazada en este periodo. Durante el embarazo se despiertan en ella recuerdos de la infancia conectados con la maternidad especialmente y es importante ser consciente de ellos para distinguir lo que le han transmitido otras generaciones o lo que ella misma ha vivido, de su propia experiencia tanto durante la gestación como en la posterior crianza.

 

La expresión en musicoterapia a través de procedimientos como la improvisación instrumental permite a la mujer exteriorizar aquellas emociones que le resulta difícil expresar con palabras por diferentes motivos, así como reconocer los cambios emocionales y los miedos internos que afloran.

 

ESFERA ESPIRITUAL:


Esta esfera tiene un sentido profundo, ya que está relacionada con el crecimiento de la humanidad, la existencia, la trascendencia, la naturaleza femenina, la conexión con lo ancestral, con la vida, con la naturaleza…

 

También con la conexión de las almas: la de la madre y la del bebé.

 

Algunas actividades que ayudan a esta conexión son la preparación del hogar, la ropa del bebé, darle su lugar físico.

 

En musicoterapia, uno de los procedimientos más potentes para fortalecer el vínculo entre madre e hijo o hija es la canción de bienvenida. De diferentes formas según el caso, se prepara una o varias canciones especialmente para el bebé, de manera que sienta que lo están esperando y que, además, podrá suponer en el futuro un puente entre el embarazo y el nacimiento que ayude a proporcionar seguridad.

 

Cada vez más estudios e investigaciones demuestran que el bienestar de la madre influye muy positivamente en el del bebé. No solo eso, sino que los beneficios se pueden extender también a la crianza.

 

¿Has encontrado tu forma de cuidarte de una forma holística durante el embarazo? 

 

La musicoterapia suma a toda la atención profesional recibida por el musicoterapeta, el poder de la música, que, entre otros muchos beneficios, es capaz de conectar los mundos extra e intrauterino mediante las vías auditiva, sensitiva y hormonal. 


Fuente: Federico, Gabriel F. (2013). Viaje musical por el embarazo. Musicoterapia Prenatal. Editorial Kier.

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